Siempre alegría

Puede ser una virtud o un inconveniente el hecho que al colombiano le sobre alegría a pesar de todo, que en cada sonrisa deje entrever un poco de lo bueno que puede ser el futuro.

El amarillo eterno

Hiriente a los ojos, el sol del río es como un amarillo presagio que acompaña al viajero hasta el final del día.

Más del río

El Peñón (Bolívar) es tal vez uno de los unicos pueblos que no posee en sus calles un solo centimetro de pavimento, pero se regocija de los kilometros eternos del río que lo cuida.

Piedecuesta, ritmo de piedra

A 15 minutos de Bucaramanga (en la época de las vías libres) Piedecuesta también se suma al ritmo de una ciudad que se niega a salir de los otros años, los antiguos.

Bucaramanga, placida

A pesar de la velocidad de los nuevos tiempos, la ciudad de Bucaramanga aún se da el lujo de separar dos horas del día, para dedicarse a la siesta.

El Brazo de Loba

Desde San Martín de Loba, el calor llena de grandiosas imagenes las retinas de los viajeros sin destino.

Simití, historia de otros pueblos

Simití se erige como uno de los pueblos más antiguos que vigilan el río Magdalena.

La Cuna Santandereana

Tal vez unos de los pueblos que más representan la cultura santandereana es el Socorro.

Durmiendo

Desde el río Magdalena se pueden ver pasar decenas de pueblos y cacerios que han dormido durante siglo al arrullo de sus aguas.

El Vallenato en Cantagallo

Los niños de Cantagallo hacen del vallenato su forma de vida, cada sonido del acordeón es instinto, es alegría. Está fotografía fue tomada en el año 2004